
-Pese a los bajos niveles, los escurrimientos hacia Sinaloa desde la Sierra de Chihuahua y Durango ofrecen un panorama más alentador-
Sinaloa.- El sistema de presas de Sinaloa enfrenta una de sus etapas más críticas, pero comienzan a observarse signos de recuperación gracias a los escurrimientos hacia Sinaloa provenientes de la Sierra de Chihuahua y Durango. Así lo informó Roy Navarrete, director estatal de Protección Civil.
Navarrete explicó que estos escurrimientos naturales fortalecen los flujos hídricos del estado, los cuales se suman a un pronóstico de lluvias por encima del promedio para agosto. Aunque el impacto en zonas urbanas como Culiacán no es directo, parte de esa agua también alimenta los ríos y mantos freáticos antes de llegar a las presas.

“Es muy importante el enriquecimiento de los mantos freáticos”, señaló el funcionario, quien destacó que el beneficio no se limita al volumen visible de las presas, sino al equilibrio subterráneo que sustenta el abasto agrícola y urbano. A pesar de ello, los niveles actuales siguen siendo preocupantes.
Según el reporte más reciente de la CONAGUA, el promedio estatal de almacenamiento se ubica en 18.6%, muy por debajo del promedio histórico. Entre las presas con menor nivel están la Josefa Ortiz de Domínguez con 7.7% y la Gustavo Díaz Ordaz con 10.1%. La esperanza es que los escurrimientos hacia Sinaloa, las lluvias locales y el bombardeo de nubes ayuden gradualmente a su recuperación.