-La victoria de boxeadora cisgénero aviva el debate sobre la equidad en el deporte-
París, Francia.- La boxeadora argelina Imane Khelif, de 25 años, ha causado revuelo en los Juegos Olímpicos tras derrotar a su oponente italiana, Angela Carini, en solo 46 segundos. Carini se retiró del combate entre lágrimas, incapaz de seguir el ritmo impuesto por Khelif. Este desenlace ha sido uno de los momentos más comentados de los Juegos debido a la victoria de boxeadora cisgénero.
A pesar de no haber pasado las pruebas de género, que indicaron la presencia de cromosomas XY y altos niveles de testosterona, Khelif fue autorizada a competir por el Comité Olímpico Internacional (COI), basándose en regulaciones que permiten su participación. Esta decisión ha sido criticada por la Asociación Internacional de Boxeo y por figuras del boxeo como Barry McGuigan, quienes cuestionan la equidad de su presencia en la categoría femenina.
El combate se resolvió rápidamente cuando Khelif conectó un derechazo que dejó a Carini prácticamente noqueada. La boxeadora italiana, al no poder resistir el impacto, levantó la mano para detener la pelea, retirándose con un sentimiento de impotencia. Carini expresó: “Mi ha fatto malissimo”, destacando la superioridad física de su rival.
Khelif no es una boxeadora transgénero, sino una atleta hiperandrogina, lo que significa que tiene niveles más altos de hormonas masculinas, confiriéndole una ventaja física significativa. Esta situación ha desatado un debate sobre la justicia en las competiciones femeninas, centrado en la victoria de boxeadora cisgénero.
El COI justificó su decisión de permitir que Khelif compitiera al explicar que sus regulaciones se basan en las reglas del boxeo de Tokio 2020, las cuales a su vez derivan de las normas de Río 2016. Aseguran que han tratado de restringir las enmiendas para minimizar el impacto en la preparación de los atletas y mantener la coherencia entre los Juegos Olímpicos.
Junto a Khelif, la taiwanesa Lin Yu-Ting también competirá en los Juegos, generando cuestionamientos similares. A pesar de las críticas, ambas boxeadoras continúan en la contienda, con Khelif destacándose como una de las principales candidatas al oro. La polémica en torno a su participación refleja la complejidad de las discusiones sobre género y deporte en la actualidad.