-Rubén Rocha Moya insta a la FGE a considerar su hipótesis sobre autosecuestro del candidato a regidor del PAS, Luis Alonso García Corrales y Juan Francisco Cerón Beltrán-
Culiacán, Sinaloa.- En una declaración que ha generado controversia, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, propuso la posibilidad de un autosecuestro del candidato en el caso de la desaparición de Luis Alonso García Corrales y Juan Francisco Cerón Beltrán, ambos operadores políticos del Partido Sinaloense (PAS). El incidente, que ocurrió el pasado sábado 13 de abril en Culiacán, ha llevado al gobernador a cuestionar las circunstancias bajo las cuales se reportaron las desapariciones.
Durante su conferencia semanal, Rocha Moya desestimó las acusaciones que apuntan a una posible implicación del gobierno estatal en el caso y sugirió que la Fiscalía General del Estado (FGE) tome en cuenta su hipótesis de autosecuestro durante la investigación. “La hipótesis la debe hacer la FGE, pero si se trata de acusar irresponsablemente, ¿no será un autosecuestro?”, comentó el gobernador, añadiendo que es imprudente responsabilizar sin pruebas al gobierno de actos criminales.
Esta declaración se produce en un contexto de tensiones políticas, ya que el PAS, previamente aliado de Morena, ahora se encuentra en coalición con los partidos opositores a nivel nacional (PAN, PRI y PRD) para las próximas elecciones locales. El cambio de alianzas ha aumentado el escrutinio sobre las acciones y declaraciones del gobierno estatal respecto a la seguridad y la política.
El caso de García Corrales y Cerón Beltrán ha capturado la atención pública, especialmente después de que líderes del PAS y otros partidos políticos organizaran una manifestación exigiendo justicia y la aparición segura de los desaparecidos. García Corrales, quien también fue director de la Comisión Estatal para la Prevención contra los Riesgos Sanitarios de Sinaloa (Cofepriss) durante el primer año de la administración de Rocha, es candidato a regidor por una alianza opositora en el actual proceso electoral.
La situación se complica aún más con la reciente memoria del levantón masivo de 66 personas en marzo, donde la versión oficial de su liberación ha sido cuestionada por las fichas de búsqueda y testimonios de familiares, indicando que al menos 12 de esas personas podrían seguir cautivas.