-Llevan días sin aire acondicionado en el hospital lo que pone en riesgo la salud de los pacientes; autoridades trabajan para resolver la situación-
Mazatlán, Sinaloa.- La ola de calor ha impactado de manera crítica al Hospital General de Mazatlán, donde los pacientes, familiares y trabajadores enfrentan temperaturas agobiantes debido a la falta de aire acondicionado. Este problema, que ha sido calificado como una “crisis sanitaria”, se originó por un daño en una tubería del sistema de refrigeración, lo que ha llevado a la dirección del hospital a tomar medidas extraordinarias
Tere González, quien tenía a un familiar internado, expresó su frustración: “Según ellos nos comentaron que habían explotado unas mangueras y se quedaron sin servicio. ¿Cómo le están haciendo a la gente que está hospitalizada? Estamos trayendo abanicos y sí nos están autorizando los abanicos”, relató mientras intentaba mitigar el calor con un ventilador.
El personal del hospital, para aliviar un poco las altas temperaturas, ha intentado abrir ventanas, pero esto no ha sido suficiente, sobre todo durante el mediodía, cuando el número de pacientes aumenta en las áreas de hospitalización. La situación ha generado un ambiente de incomodidad e inseguridad para quienes se encuentran en estado crítico.
El director del Hospital General, Carlos Leonel Verdugo Hernández, confirmó la causa del problema y explicó que se trata de “vicios ocultos” en la infraestructura del hospital. “Se rompió un tubo de gran calibre que lleva agua para enfriar todos los serpentines desde el primer día. Estamos trabajando para solucionarlo. Se solicitó el tubo repuesto, pero no es un tubo común y no se vende en cualquier parte”, aclaró el director, quien se mostró optimista en que el problema se resolvería a lo largo del día.
Sin embargo, la falta de aire acondicionado ha llevado a la suspensión de cirugías programadas, y las emergencias están siendo atendidas en clínicas cercanas con las que se tienen convenios. Algunas personas incluso han sido trasladadas al ISSSTE y al Seguro Social, generando preocupación en la comunidad por la falta de atención oportuna en el hospital.