-El exsecretario de Seguridad Pública, Juan Ramón Alfaro Gaxiola, es asesinado afuera de su domicilio-
Mazatlán, Sinaloa.- En un hecho que ha estremecido a la comunidad, el exsecretario de Seguridad Pública Municipal, Juan Ramón Alfaro Gaxiola, fue víctima de un atentado directo la tarde de ayer, frente a su domicilio en la colonia Hacienda de Urías. Según testigos, se escucharon detonaciones de arma de fuego que dejaron al exfuncionario gravemente herido, resultando en su fallecimiento poco después mientras recibía atención médica.
El incidente ocurrió alrededor de las 18:45 horas. Vecinos de la zona reportaron disparos frente a la casa color verde de Alfaro Gaxiola. “Se escucharon muy fuerte los truenos”, comentó un empleado cercano a la escena. Las calles aledañas fueron cerradas y acordonadas por elementos preventivos, quienes encontraron cinco casquillos de arma corta en el lugar.
Testigos señalan que los agresores podrían haber llegado en una motocicleta, aprovechando los callejones y el tráfico para huir rápidamente tras el ataque. La escena quedó marcada por casquillos percutidos y una mancha de sangre frente a una camioneta Ford Explorer verde, donde aparentemente fue trasladado de emergencia a una clínica privada en la avenida Manuel J. Clouthier.
De acuerdo con un oficial en el lugar, todo indica que se trató de un “ataque directo”, dadas las circunstancias del atentado. Hasta el momento, las autoridades han mantenido total hermetismo respecto a posibles responsables o líneas de investigación. Peritos de la Fiscalía General del Estado trabajan en la recolección de pruebas, mientras la comunidad exige respuestas ante este lamentable suceso.
Juan Ramón Alfaro Gaxiola, quien se desempeñó como secretario de Seguridad Pública Municipal durante la administración de Luis Guillermo Benítez Torres (2021-2022), había sido jubilado tras años de servicio activo. Este ataque directo no solo termina con su vida, sino que abre interrogantes sobre la creciente violencia en Mazatlán, donde, en las últimas semanas, los atentados contra figuras relacionadas con la seguridad pública han encendido las alarmas.
El caso de Alfaro Gaxiola se suma a una serie de hechos que refuerzan la percepción de vulnerabilidad en la región