El día de ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador declaro la construcción del tren maya como un “asunto de seguridad nacional” esto como una medida para continuar con la obra más grande de su gobierno.
El Fondo Nacional de Turismo (fonatur) dio a conocer que esto sucedió después de que la secretaria de gobernación y de seguridad y protección ciudadana serian las encargadas de dicha obra, pues se había declarado como asunto de seguridad nacional. Se reanudo el tramo número 5 del Tren Maya que va de Playa del Carmen a Tulum y está a cargo del Ejército mexicano, que subcontrató a tres empresas trasnacionales para realizar las obras: Mota Engil, Azvindi Ferroviario y Consorcio ICA.
Esto como era de esperarse desato el descontento de muchas agrupaciones ambientalistas e incluso figuras políticas como el dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) que tildo de una “artimaña” que pisoteaba la ley a este movimiento e hizo un llamado a proteger el medio ambiente.
Por su parte, el colectivo Greenpeace se manifestó en donde se realiza el desmonte de selva para exigir al presidente Andrés Manuel López Obrador que detenga los trabajos, Viridiana Lázaro Lembrino, especialista en agricultura y cambio climático en Greenpeace México, llamó a López Obrador a detener de inmediato las obras debido a que continúa violando la ley y los acuerdos internacionales.