CDMX.- En una rueda de prensa desde Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó a la empresa estadounidense Vulcan Materials de destruir el territorio en Quintana Roo, después de que esta denunciara que militares habían irrumpido en sus instalaciones.
A pesar de las críticas del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, sobre el trato que reciben las empresas de su país en México, López Obrador afirmó que el gobierno mexicano no está en contra de las empresas estadounidenses, sino que velará por los intereses del pueblo mexicano y cuidará su territorio.
El presidente mexicano afirmó que el daño ecológico ocasionado por la empresa estadounidense Vulcan Materials en el Caribe mexicano es inaceptable y que los senadores republicanos que defienden a la minera deberían sentir vergüenza por el daño ocasionado. Asimismo, denunció la complicidad de las anteriores autoridades mexicanas en este ecocidio.
López Obrador aseguró que su gobierno no tiene como objetivo ahuyentar la inversión extranjera, pero no se puede tolerar que se destruya el territorio. “No podemos aceptar, tolerar, porque estaríamos traicionando al pueblo de México, no podemos permitir eso”, afirmó.
El presidente mexicano aceptó que el secretario de Estado está en su papel de representar los intereses de los inversionistas de su país, pero argumentó que como jefe del Ejecutivo tiene que velar por los intereses del pueblo mexicano.
En conclusión, la defensa del territorio y el cuidado del medio ambiente son fundamentales para el presidente López Obrador. A pesar de las diferencias con el gobierno estadounidense, no descarta una fractura en la relación binacional y considera que en naciones libres, independientes y soberanas, deben existir estos desacuerdos.